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“El nostre bikini” amb mozzarella, pernil ibèric i tòfona negra. Una rèplica molt encertada del “Bikini Ç24” que serveix Carles Abellan al seu TapaÇ 24, destacant especialment una tòfona abundant i molt aromàtica en plena temporada. Boníssim.
Empezamos con los snacks: arbequinas, semillas de soja en tandoori, 3D de guacamole y cornete de Camembert con avellana y trufa. Bien.
A modo de postre y fuera de carta nos ofrecieron un Gorgonzola trufado que les acababa de llegar de Alba y que nos recomendaron con especial interés. Accedimos y confirmamos que ese bocado constituyó una auténtica delicia (textura muy cremosa, sabor finísimo y un sutil fondo trufado final) pero cuyo precio para dos pequeños bocados como el que muestra la fotografía (nos lo anticiparon, quede claro) nos pareció excesivo. Tenemos perfectamente asumido el sobreprecio que viene implícito en un restaurante de este nivel pero creemos que debería ser aplicado con mayor contención en productos cuyo único tratamiento y manipulación consiste en sacarlos de la nevera y servirlos en el plato.
Patata con trufa y yema de huevo. Se come con cuchara..... y la sensación es extraordinaria. Inenerrable, hay que probarlo para comprenderlo.
Trufa www.esmaltemaniaca.com.br/2015/06/trufa-esmalteria-da-kk....
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A continuació ens van oferir tastar una interpretació de la “Sopa de tòfona Elysée” creada per Paul Bocuse al 1975. Brou d’au, verdures, bolets, foie i tòfona, tot servit en un recipient individual recobert de pasta de full que, després d’enfornat, cal trencar i introduir a l’interior abans de menjar.
El canelón de ciervo con bechamel trufada presentó un relleno muy sabroso en un conjunto muy fino, en el que quizá la bechamel requería un poco más de potencia en el perfume de la trufa. En cualquier caso, estuvo exquisito.
Realmente sorprendente el tiramisú trufado. Bajo una capa helada de chocolate blanco conteniendo virutas de trufa incrustadas se esconden el bizcocho empapado en café y el mascarpone (ambos muy finos y muy suaves) rodeado el conjunto por un crumble de sabores intensos y concentrados a amaretto que, junto a una trufa de evidente y grata presencia, dotan de intensidad y personalidad a este postre. Acabamos con él e inmediatamente habríamos vuelto a empezar con otro igual. Excelentísimo.
Trufa de Chocolate
Consideradas o ouro negro da chocolateria são produzidas artesanalmente, recebeu este nome em analogia a esta iguaria nobre e de sabor refinado.
Diz-se que tiveram origem em um erro do chef patissier da corte austríaca, no fim do século XIX. Preparando uma das sobremesas para o banquete em honra de um príncipe russo, uma falha fez com que ele inventasse a trufa de chocolate.
Ante o enorme sucesso das trufas entre os ilustres convidados, o chef patissier tentou, por vários dias, repetir o erro, até conseguir refazer aquelas jóias de chocolate. Desde então, nada as supera dentre os bombons mais sofisticados do mundo.
As primeiras trufas de chocolate eram produzidas de uma massa a partir de chocolate nobre, creme de leite, glucose e conhaque, e depois eram banhadas em cacau em pó, parecidas, realmente, com a verdadeira trufa tirada da terra.
Apesar de delicioso, a durabilidade dessa trufa era muito pequena, pois sem proteção absorvia rapidamente a inimiga número um do chocolate.
Então, iniciou-se a tradição de banhar em chocolate e a sua durabilidade passou de um dia para aproximadamente vinte dias.
Depois começaram a ser feitas nas formas de bombons (PVC), que hoje são nossos famosos bombons trufados, que além da tradicional, podemos variar o sabor, desde os mais requintados como damasco e nozes até os mais comuns como maracujá e limão, sem perder o valor da tradição.
Bjoks
e eu tava morrendo de saudades
desse cantinho delicioso!!!
Como aperitivo llegó este magnífico paté de becada junto a unas barritas de pan tostado con aceite de trufa. ¡Caramba con el aperitivo!, casi fue lo mejor de la comida. ¡Bestial!.
Ou amb mantega (com una escuma molt cremosa) i tòfona. Bufff!, espectacular, tant per la qualitat de l’ou i la intensa aroma de la tòfona com per la bona combinació del conjunt. Magnífic.
Espárragos con vinagreta de trufa negra, crujiente de jamón ibérico y queso manchego. Espárragos en conserva rematados unos con jamón ibérico y otros con queso manchego. El aceite de trufa negra que queda en el fondo del plato provoca tentaciones de pasar la lengua por él. Muy bueno.
Arriba l’aperitiu: tàrtar de tonyina sobre alga nori torrada (molt bo), patates braves en milfulls (una mica crua la patata) i biquini de formatge Morbier amb tòfona (bé).
Llega la yema de huevo (sin la clara) cocinada a baja temperatura y colocada sobre una fina crema de tupinambo. Sobre el conjunto se rallan, ya en la mesa, unas láminas de trufa de Prades. Buen plato.
“Sopa de tòfona Elysée”, aquí havent incorporat la pasta de full al seu interior, quedant inflada i ben impregnada del brou, com una sopa d’all però amb tòfona en comptes d’all ☺. El conjunt ens va semblar molt suculent i molt ben perfumat.
Y el mejor plato de una comida en la que todo estuvo más que bueno fue este carpaccio de toro y trufa de verano (tuber aestivium). Espectacular combinación, para comerlo por cubos.
Trufas com diversos tipos de recheios, pode ser feita de chocolate ao leite,branco ou meio amargo.
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