View allAll Photos Tagged ds_2015

Una cosa es saber y otra saber enseñar.

El Mapa de la Conciencia también lanza una nueva luz sobre el progreso de la historia. La distinción entre la fuerza y el poder es de suma

importancia para el propósito de este estudio. Podemos, por ejemplo, investigar una época histórica, tal como el fin del colonialismo británico en la

India. Si calibramos la posición del Imperio Británico en esa época, que era de interés propio y explotación, encontraremos que estuvo muy por debajo del nivel crítico de 200 en la escala de conciencia. La motivación de Mahatma Gandhi (calibrado en 700) estaba muy cerca de la cima del rango de la conciencia normal humana. Gandhi ganó en su esfuerzo debido a que

su posición tenía gran poder. El Imperio Británico (calibrado en 175) representaba la fuerza y, cuando la fuerza se encuentra con el poder, la fuerza es con el tiempo derrotada.

Los pensamientos son los ladrillos con los que has de construir el edificio de tu personalidad. El pensamiento determina el destino. El mundo que te rodea es el reflejo de tus propios pensamientos.

¡Hijo de la luz, no quedes por más tiempo en la oscuridad! Eres el conocimiento: ¡Conócete a ti mismo! La dicha no es una cualidad, ni es objeto o un estado que puedas adquirir; ¡tú eres la dicha! Sé consciente de ello.

El ―Yo‖ se sumerge de modo irreconocible en un cenagal interminable de autodefiniciones. Si las definiciones son ―buenas‖, uno se siente feliz; si son ―malas‖, uno se siente deprimido o culpable. De hecho, todas las autodefiniciones son falaces e igualmente conducen a conclusiones erróneas. Es útil reconocer que la ilusión de un yo o entidad separada crea una falsa identidad cuya tenacidad es aparentemente difícil de superar por diversas razones. Uno se enamora de este precioso ―yo‖, que termina por convertirse en una obsesión y el foco subjetivo del lenguaje y el pensamiento. El yo adquiere cierto glamour como héroe o heroína del propio drama o historia de la vida. En esto, el ―Yo‖ se convierte en el perpetrador, la víctima, la causa, el destinatario responsable de toda culpabilidad y alabanza y en el actor principal del melodrama de la vida. Esto también requiere que el yo sea defendido y que su supervivencia se convierta en algo de suma importancia. Esta incluye la necesidad de tener ―razón‖ a toda costa. La creencia en la realidad del yo termina siendo equivalente a la supervivencia y a la continuidad de la propia existencia.

El momento presente es como es. Siempre. ¿Puedes dejarlo ser?

Un guerrero ya no puede llorar, y su única expresión de angustia es un estremecimiento que le viene desde las profundiDades mismas del universo. Es como si una de las emanaciones del Águila estuviera hecha de pura angustia, y cuando golpea al guerrero, su estremecimiento es infinito.

Una de las cosas más dramáticas de la condición humana es la macabra conexión que existe entre la estupidez y la imagen de sí. Es la estupidez lo que obliga al hombre corriente a descartar cualquier cosa que no se ajuste a las expectativas de su imagen de sí mismo. El hecho de ser hombres corrientes, por ejemplo, hace que seamos ciegos a una parte del conocimiento accesible al ser humano que es absolutamente crucial: la existencia del punto de encaje y el hecho de que puede desplazarse.

No trates de alejar los pensamientos irrelevantes y poco importantes. Cuanto más lo hagas, más intensamente retornarán y con mayor fortaleza. Desgastarás tu energía y tu voluntad. Se indiferente.

¿Qué era lo que había descubierto Planck que le causaba tan profunda inquietud? Que la estructura básica de la naturaleza es granular o, como les gusta decir a los físicos, «discontinua»

los pensamientos existen por su propia cuenta, no son parte de tu naturaleza, van y vienen ― tu permaneces. Tu eres como el cielo: nunca viene, nunca se va, está siempre ahí. Las nubes van y vienen, son un fenómeno pasajero, no son eternas. Incluso si intentas agarrarte a un pensamiento, no podrás retenerlo por mucho tiempo; tendrás que dejarlo ir, los pensamientos tienen su propio nacimiento y su propia muerte. Los pensamientos no son tuyos, no te pertenecen. Son visitantes, invitados, no son los anfitriones.

Concentrarse es mantener la mente fija en una forma u objeto durante largo tiempo. Para hacer desaparecer las oscilaciones de la mente y algunos otros obstáculos que se encuentran en el camino debe practicarse la concentración en una sola cosa.

6. Verde: El yo sensible. Centrado en la comunidad, en la relación entre los seres humanos, en las redes y en la sensibilidad ecológica. El espíritu humano debe ser liberado de la codicia, del dogma y de la división; el respeto y la atención a los demás reemplaza a la fría razón; respeto y cuidado por la tierra, Gaia y la vida. Establece vínculos y uniones laterales y es contrario a las jerarquías. Yo permeable y relacional centrado en redes. Enfasis en el diálogo y las relaciones. Fundamento de las comunidades de valor (agrupaciones libremente elegidas basadas en sentimientos compartidos). Toma de decisiones sustentada en la conciliación y el consenso (desventaja: dilación “interminable” del proceso de toma de decisiones). Presta atención a la espiritualidad, la armonía y el enriquecimiento del potencial humano. Fuertemente igualitario, antijerárquico, centrado en valores plurales, en la construcción social de la realidad, en la diversidad, el multiculturalismo y la relativización de los valores, una visión del mundo a la que habitualmente se conoce con el nombre de relativismo pluralista. Subjetivo y centrado en el pensamiento no lineal; fomenta la cordialidad, la sensibilidad, el respeto y el cuidado por la Tierra y por todos sus habitantes.

“La historia es un arte, no una ciencia. Es algo construido y aceptado como una explicación más o menos satisfactoria de acontecimientos que, en realidad, no tienen ninguna explicación. La mayor parte de lo sucedido en la historia es completamente irracional, pero la gente siempre piensa que tiene que encontrarle un sentido, un significado.”

  

(...) Si no hubieras sufrido como has sufrido, no tendrías profundidad como ser humano, ni humildad, ni compasión. No estarías leyendo esto. El sufrimiento abre el caparazón del ego, pero llega un momento en que ya ha cumplido su propósito. El sufrimiento es necesario hasta que te das cuenta de que es innecesario.

No basta saber, se debe también aplicar. No es suficiente querer, se debe también hacer.

Ser un guerrero no es sólo cuestión de desearlo. Es más bien una lucha interminable que seguirá hasta el último instante de nuestras vidas. Nadie nace guerrero, como nadie nace hombre corriente. Somos nosotros quienes nos hacemos lo uno o lo otro.

El carácter es el factor determinante de la victoria y la derrota, del éxito y del fracaso en todos los campos de la vida. Un hombre de buen carácter disfruta de la vida aquí y más allá.

A través de la historia, todas las grandes religiones y disciplinas

espirituales han desarrollado técnicas para ascender a través de estos niveles de conciencia. La mayoría insinúa o declaran específicamente, que

ascender esta escalera es una ardua labor, y que el éxito depende de tener un maestro (o por lo menos enseñanzas) que le ofrezca instrucciones

específicas e inspiración al aspirante, quien podría, de otra manera, desesperarse sobre su incapacidad de lograr las metas sin ayuda. Tenemos la esperanza de que nuestro Mapa ayudará a la humanidad en su desempeño por alcanzar esta meta.

La mayoría de la gente confunde el ahora con lo que ocurre en el ahora, pero son dos cosas distintas. El ahora es más profundo que lo que ocurre en él. Es el espacio en el que ocurren las cosas. Por tanto, no confundas el contenido de este momento con el ahora. El ahora es más profundo que cualquier contenido que surja en él.

El pasado y el futuro obviamente no tienen realidad propia. Lo mismo que la luna no tiene luz propia, sino que puede solamente reflejar la luz del sol, así el pasado y el futuro son sólo pálidos reflejos de la luz, el poder y la realidad del presente eterno. Su realidad es "prestada" del ahora.

Los filósofos nunca son felices aquí. Ahora no es su tiempo ni su espacio. Viven allí, viven en cualquier otro lugar.

La naturaleza tiene un carácter integralmente relacional, y una interferencia en un punto desencadena imprevisibles reacciones en cadena."

"Tales decía que no existía diferencia entre la vida y la muerte. ¿Por qué no mueres entonces?, le preguntaron. Porque no hay diferencia ninguna, repuso."

A tu puerta fue a parar

mi jaca la dejé suelta

y a tu puerta fue a parar,

y es que lo que bien se aprende

nunca se puede olvidar

eso dicen los que entienden.

Lo que uno experimenta como la vida exterior, las situaciones que uno encuentra, las cosas que pasan, las relaciones que tiene, es decir, el modo en que la persona experimenta la vida, es siempre un reflejo de su conciencia, de su estado interior, del estado de la mente. Si una persona, por ejemplo, siempre está rodeada de personas violentas, en cada situación encuentra violencia, significa que hay algo dentro que es una fuerza violenta, agresiva.

Con tus pensamientos de ahora estás creando tu futuro; si piensas con nobleza tendrás una conducta noble. Si piensas con bajeza, ningún ambiente te hará cambiar. Así pues, los pensamientos y las acciones son interdependientes.

conciencia compartir concordia y paz

Cuando entras en el ahora, sales del contenido de tu mente. La corriente incesante de pensamientos se apacigua. Los pensamientos dejan de absorber toda tu atención, ya no te ocupan completamente. Surgen pausas entre pensamientos, espacio, quietud. Empiezas a darte cuenta de que eres mucho más profundo y vasto que tus pensamientos.

Observe a su mente desapasionadamente; esto es suficiente para calmarla. Cuando está serena, usted puede ir más allá de ella. No la mantenga ocupada todo el tiempo. Deténgala —y solo sea.

Si usted le da reposo, ella se serenará y recobrará su pureza y su fuerza. El pensamiento constante la extenúa.

"Al centro de esta nueva manera de encarar las cosas, encontramos la idea de un mundo unitario sin la menor atadura, tejido de interacciones mutuas, donde una cosas no se entiende solo en la medida que se entienda otra y recíprocamente. Es imposible, en esta perspectiva de considerar el hombre aisladamente en la naturaleza."

El poder del hombre es incalculable; la muerte existe sólo porque la hemos intentado desde el momento en que nacemos. El intento de la muerte puede suspenderse haciendo que el punto de encaje cambie de posiciones.

Él puede engañar a otros, y si él continúa engañando lo suficiente, puede engañarse a sí mismo también. Pero no será un cambio. Simplemente está desperdiciando la vida – que es inmensamente valiosa porque no la puedes recuperar.

Cualquier movimiento del punto de encaje significa alejarse de la excesiva preocupación por el yo individual. Los chamanes creen que es la posición del punto de encaje lo que hace que el hombre moderno sea un ególatra homicida, un ser totalmente atrapado en la imagen de sí mismo. Habiendo perdido cualquier esperanza de regresar a la fuente de todo, el hombre corriente busca consuelo en su egoísmo.

Y ese descubrimiento... te lleva a mitad del camino de vuelta a casa. Después de haberte desidentificado de todos y cada uno de los objetos finitos, descansas como Conciencia infinita. Eres libre, abierto, vacío, cristalino, radiante, suelto, liberado, exaltado e impregnado de una vacuidad beatífica que existe antes del espacio, antes del tiempo, antes de las lágrimas, antes del terror, antes del dolor, de la mortalidad, del sufrimiento y de la muerte. Has descubierto el gran No Nacido, el inmenso Abismo, el Fundamento incalificable de todo lo que es, de todo lo que fue y de todo lo que será.

Cuando dos personas maduras están enamoradas, ocurre una de las más grandes paradojas de la vida, uno de los fenómenos más bellos: están juntos y sin embargo tremendamente solos; están tan unidos que casi son uno. Pero su unión no destruye su individualidad. De hecho, la realza: se vuelven más individuos. Dos personas maduras enamoradas se ayudan mutuamente a ser más libres.

Ah! La angustia, la abyecta rabia, la desesperación...

 

Ah! La angustia, la abyecta rabia, la desesperación

De no yacer en mí mismo desnudo

Con ánimo de gritar, sin que sangre el seco corazón

En un último, austero alarido!

 

Hablo -las palabras que digo son nada más un sonido:

Sufro -Soy yo.

Ah, extraer de la música el secreto, el tono

De su alarido!

 

Ah, la furia -aflicción que grita en vano

Pues los gritos se tensan

Y alcanzan el silencio traído por el aire

En la noche, nada más allí!

Este estado de cosas empieza a cambiar con la emergencia del “pensamiento de segundo grado”, una modalidad plenamente consciente de los estadios interiores del desarrollo que permite -aunque no lo haga de un modo claramente articulado- dar un paso atrás y asumir una visión más global. Por ello el pensamiento de segundo grado reconoce y comprende el papel que desempeñan -y, en consecuencia, la necesidad- del resto de los memes. Por esta razón la conciencia de segundo grado no sólo piensa en términos de un determinado nivel sino de la espiral completa de la existencia.

 

Así, cuando el meme verde comienza a aprehender los muchos y muy diversos sistemas y contextos que existen en las diferentes culturas, el pensamiento de segundo grado, que no en vano es conocido también con el nombre del meme sensible (es decir, sensible a la marginación de los demás) va un paso más allá y, al advertir los ricos contextos que vinculan estos sistemas plurales, comienza a integrar los sistemas separados en espirales y holoarquías integrales y holísticas. El pensamiento de segundo grado, dicho en otras palabras, resulta útil para pasar del relativismo al holismo o, lo que es lo mismo, del pluralismo al integralismo.

 

La extraordinaria investigación llevada a cabo por Graves, Beck y Cowan señala que la conciencia integral de segundo grado se despliega, al menos, a través de dos grandes olas:

Todo lo que nos irrita de los demás, nos puede ayudar a entendernos a nosotros mismos.

"En esta nueva manera de pensar, espíritu y materia se resuelven en procesos, mientras que las cosas se hallan transformadas en acontecimientos.

"La conciencia de una solidaridad indisoluble del hombre con la naturaleza puede ser acablante o evidente para algunos. Pero aparece como humillante a una civilización donde el hombre siempre ha sido considerado como el coronamiento de la creación y su "amo y poseedor."

Tú no eres lo que sucede,

eres a quien le sucede.

El guerrero, como maestro, enseña tres técnicas a su aprendiz para ayudarle a borrar su historia personal; perder la propia importancia, asumir la responsabilidad de los propios actos y utilizar a la muerte como consejera. Sin el efecto benéfico de estas tres técnicas, el borrar la historia personal le hace uno veleidoso, evasivo e innecesariamente dudoso de sí mismo y de sus acciones.

Todos los caminos son lo mismo: no llevan a ninguna parte. Sin embargo, un camino sin cora-zón nunca es agradable. En cambio, un camino con corazón resulta sencillo: a un guerrero no le cuesta tomarle gusto; el viaje se hace gozoso; mientras un hombre lo sigue, es uno con él.

1 2 ••• 9 10 12 14 15 ••• 18 19