lillarra2006
P6163218
Intervino la señora, y sirviéndose de su prestigio y su buena consideración
Que aquellas gentes tenían hacia su persona, consiguió, no sin esfuerzo, salvar la vida del joven y trasladarlo a su casa, donde podría reponerse.
El joven náufrago llamado Gastón de Chatelnauday, era hijo del vizconde
D’Aprefort, muerto hacía dos años; un personaje que, además de su nobiliario título, también había ostentado el del hombre más odiado de la costa.
De los dos títulos por suerte Gastón había heredado sólo el primero, el nobiliario, además del mando en una carabela de guerra francesa.
El temerario arrojo de su juventud le había llevado a demostrar su valor en una arriesgada y trágica aventura que le arrojo a los arenales de Deba.
Durante la convalecencia del invitado en la casa, fue naciendo una gran simpatía entre este y las dos mujeres, simpatía que se convirtió en amor entre el joven y katalintxu
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Intervino la señora, y sirviéndose de su prestigio y su buena consideración
Que aquellas gentes tenían hacia su persona, consiguió, no sin esfuerzo, salvar la vida del joven y trasladarlo a su casa, donde podría reponerse.
El joven náufrago llamado Gastón de Chatelnauday, era hijo del vizconde
D’Aprefort, muerto hacía dos años; un personaje que, además de su nobiliario título, también había ostentado el del hombre más odiado de la costa.
De los dos títulos por suerte Gastón había heredado sólo el primero, el nobiliario, además del mando en una carabela de guerra francesa.
El temerario arrojo de su juventud le había llevado a demostrar su valor en una arriesgada y trágica aventura que le arrojo a los arenales de Deba.
Durante la convalecencia del invitado en la casa, fue naciendo una gran simpatía entre este y las dos mujeres, simpatía que se convirtió en amor entre el joven y katalintxu