LLuerna (2013)
Si nuestra anterior incursión en Lluerna se saldó con sobresaliente, ésta, con un año más de experiencia en un equipo ya de por sí inspirado y con el impulso (tanto en el bolsillo como en el estado de ánimo) que supone recibir el reconocimiento de la guía Michelin, no podía quedarse atrás. Y no lo hizo: brilló la cocina, cumplió la sala y todo el conjunto rezumó motivación en un lugar que empieza a volar muy alto. Lo sentenciábamos hace aproximadamente un año: “uno de los mejores restaurantes de la ciudad de Barcelona se encuentra en la localidad colindante de Santa Coloma de Gramenet”. Pues eso.
En la fotografía: coulant de patata, trufa, huevo ecológico y jugo de asado (servido en dos medias raciones con ralladura extra de trufa por encima a petición nuestra). Una cubierta exterior de textura firme y viscosa (patata del bufet tratada con metilcelulosa para darle forma y consistencia al coulant) que esconde en su interior una parmentier de patata trufada premeditadamente fluida junto a una yema de huevo ecológico casi cruda. Tras abrir el coulant, el huevo, la patata y la trufa se esparcen sobre el jugo de asado para componer un mar de sustancia capaz de acabar con todas las existencias de pan. Un suculento bocado al que le sentó muy bien la dosis extra de trufa.
Lo mejor: el jurel, el coulant, el cochinillo, la liebre, la torrija; la calidad del conjunto
Mejorable: el tiramisú
Recomendado: para darse un buen homenaje
LLuerna (2013)
Si nuestra anterior incursión en Lluerna se saldó con sobresaliente, ésta, con un año más de experiencia en un equipo ya de por sí inspirado y con el impulso (tanto en el bolsillo como en el estado de ánimo) que supone recibir el reconocimiento de la guía Michelin, no podía quedarse atrás. Y no lo hizo: brilló la cocina, cumplió la sala y todo el conjunto rezumó motivación en un lugar que empieza a volar muy alto. Lo sentenciábamos hace aproximadamente un año: “uno de los mejores restaurantes de la ciudad de Barcelona se encuentra en la localidad colindante de Santa Coloma de Gramenet”. Pues eso.
En la fotografía: coulant de patata, trufa, huevo ecológico y jugo de asado (servido en dos medias raciones con ralladura extra de trufa por encima a petición nuestra). Una cubierta exterior de textura firme y viscosa (patata del bufet tratada con metilcelulosa para darle forma y consistencia al coulant) que esconde en su interior una parmentier de patata trufada premeditadamente fluida junto a una yema de huevo ecológico casi cruda. Tras abrir el coulant, el huevo, la patata y la trufa se esparcen sobre el jugo de asado para componer un mar de sustancia capaz de acabar con todas las existencias de pan. Un suculento bocado al que le sentó muy bien la dosis extra de trufa.
Lo mejor: el jurel, el coulant, el cochinillo, la liebre, la torrija; la calidad del conjunto
Mejorable: el tiramisú
Recomendado: para darse un buen homenaje