Back to photostream

MONDOÑEDO, Lugo. Báculo obispo Gonzalo. S. XII.

Afirma una muy antigua tradición que siendo Gonzalo obispo de la diócesis dumiense o mindoniense, que con ambas forma se identifica, una flota de naves vikingas apareció frente a las costas del norte de la provincia de Lugo, a la altura de Foz, con la ya conocida intención de saquear y destruir. Los habitantes pidieron protección al obispo y éste se dirigió al Alto da Grela, desde donde podía ver al invasor. Allí se postró para rezar y una tras otra las naves normandas se fueron hundiendo. Se ha recuperado la tradición de llevar la imagen del santo desde la basílica de San Martín de Mondoñedo, de la que fue obispo, hasta la ermita construida en este alto.Gonzalo fue proclamado santo por las gentes y, a su muerte, inhumado en un sepulcro granítico conservado en el templo y cerrado con tres llaves hasta hoy.

 

"La primera vez que se abrió el sepulcro de San Gonzalo, en 1648 por el Obispo Torres Grijalba, se encontró el célebre báculo. Tiene un astil de madera de 1,45 m. Termina en macolla, voluta y cabeza final de animal con bola en la boca. Esta parte es de cobre con restos de esmaltes y mide 0,11 m. El báculo encontrado en el sepulcro es prueba de la general tradición de aquella tierra sobre que fue Obispo. (Flórez).

El anillo fue encontrado en el sepulcro en 1914 por el párroco Don José Fiallega. Es de oro y tiene una piedra de cuarzo engarzada por cuatro cabecitas de ave con unos brillantes en los ojos, de tamaño muy diminuto. Lleva inscripción "NOLO ESSE DATUS NEQUE VENUMDATUS.(1)

 

Se trata de dos piezas de excepcional valor arqueológico. Creo pertenecen al siglo VIII. Con motivo del Bimilenario de Lugo (o Bimilenario de Lugo celebrouse entre os anos 1975 e 1976), se reunieron en esa ciudad un gran grupo de Arqueólogos de diferentes países de Europa. Al visitar San Martín, pensaron que el báculo y el anillo son del siglo VI. "La España Románica", en el tomo correspondiente a Galicia, afirman del anillo, sin especificar porqué, que la inscripción que lleva lo hace sospechoso". (2)

 

Por su parte, Yzquierdo Perrín señala que las dos piezas “parecen datar de una fecha en torno a la muerte del obispo santo que se sitúa en los años iniciales del siglo XII. Son, junto con las piezas del tesoro de San Rosendo, los ajuares episcopales más antiguos que se conocen en Galicia”. Destaca también los pedazos de tela a los que aluden los relatos de apertura del sepulcro. En el de 1704 se menciona “un cíngulo de seda, tejido con hilo de oro de muy linda forma” (3)

 

Hay que señalar que el nombre Gonzalo ha creado confusión. El padre Flórez sitúa su episcopado entre “antes del 1071” hasta 1112. Escribe que no sabemos si éste es el obispo tomado por santo; “yo creo son diversos”, afirma. (4)

 

Otro báculo, éste de Limoges y del primer cuarto del s. XIII, procedente de Ribadeo pero de esta sede episcopal, orna las colecciones del Museo de Arte de Cataluña, que adquirió la colección Plandiura que lo contenía.(5) Se ha atribuido al obispo Pelayo II de Cebeyra, prelado de Mondoñedo entre 1199 y 1218. La sede, de azarosa y fascinante historia, había sido trasladada a Ribadeo por orden del rey Fernando II para repoblar la zona. Antes había pasado por Villamayor de Brea, y sus obispos adoptaron también el término “valibriense”.

 

(1) Se ha traducido como: “No quiero ser dado ni vendido”.

(2) SANTOS SAN CRISTÓBAL, Sebastián. “Antigua Catedral de San Martín de Mondoñedo”, Mondoñedo, 1995, p. 57.

(3) YZQUIERDO PERRÍN, Ramón. “SAN MARTÍN DE MONDOÑEDO. Guía breve”, Edilesa, 2006, p.40.

(4) FLÓREZ, Henrique. “España Sagrada”, tomo XVIII, Madrid, 1764, p. 117.

(5) Catálogo exposición “EL ESPLENDOR DEL ROMÁNICO”. Fundación Mapfre, Madrid, 2011, pp. 242-243.

 

 

 

63 views
0 faves
0 comments
Uploaded on February 6, 2025
Taken on September 3, 2024