Diablo en el arte ; esperanza aragones
Yellow is forbidden = Prohibido el amarillo
Judas, with a horrible devil as consultant, receives from the Jews a purseful of coins as payment for his sale of Christ. The treacherous Apostle is portrayed as a Jew with a large yellow cape. This religious grouping identifies him as not only sharing the root of his name but also the responsibility for the death of Christ.
Yellow was a striking colour which served to identify the Jews and distinguish them from the Christians, hence the bad luck and sinister connotations of this tonality.
From the beginning of the 13th century The Popes put special emphasis on this: that the Jews use distinctive clothing that would differentiate them from the Christians so that these latter would not enter into economic pacts with them. The distinctive elements were many and diverse, from a yellow brooch to a peaked cap to a special cloak which in the Kingdom of Aragon was called the ‘clochard’ for its resemblance to a bell. That is why in medieval iconography, the Jews are portrayed with a cloak of this colour. As we see in this scene representing the pact of Judas in the Scrovegni Chapel in Padua (beginning of the 14th century), and in scenes like this where the Jews appear as wizards and necromancers, as they are those related to diabolical pact.
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diabloenelarte.blogspot.com.es/
Prohibido el amarillo
Judas asesorado por un horrible diablo recibe la bolsa de monedas de los judíos como pago por la venta de Cristo. El falso Apóstol está caracterizado como un judío con un gran manto amarillo, grupo religioso que también le identifica al compartir la raiz de su nombre y la culpabilidad en la muerte de Jesús.
El amarillo era un color llamativo que servía para identificar a los judíos y distinguirlos de los cristianos, de ahí el mal fario y contenido siniestro de esta tonalidad. Desde los primeros años del s.XIII los Papas pusieron especial énfasis en que los judios usaran ropas distintivas que los diferenciaran de los cristianos para que estos últimos no llegaran a pactos económicos con ellos. Los elementos distintivos eran muy variados desde un broche de color gualdo, un gorro picudo o una capa especial que en el Reino de Aragón se llamaba "clochard" por su semejanza con la campana, por ello en la iconografía medieval se caracteriza a los judíos con un manto de este color. Así se ve en esta escena del pacto de Judas de la Capilla Scrovegni de Padua (principios del s.XIV), y en escenas donde aparecen los judíos como magos y nigromantes, como son las del pacto diabólico.
Yellow is forbidden = Prohibido el amarillo
Judas, with a horrible devil as consultant, receives from the Jews a purseful of coins as payment for his sale of Christ. The treacherous Apostle is portrayed as a Jew with a large yellow cape. This religious grouping identifies him as not only sharing the root of his name but also the responsibility for the death of Christ.
Yellow was a striking colour which served to identify the Jews and distinguish them from the Christians, hence the bad luck and sinister connotations of this tonality.
From the beginning of the 13th century The Popes put special emphasis on this: that the Jews use distinctive clothing that would differentiate them from the Christians so that these latter would not enter into economic pacts with them. The distinctive elements were many and diverse, from a yellow brooch to a peaked cap to a special cloak which in the Kingdom of Aragon was called the ‘clochard’ for its resemblance to a bell. That is why in medieval iconography, the Jews are portrayed with a cloak of this colour. As we see in this scene representing the pact of Judas in the Scrovegni Chapel in Padua (beginning of the 14th century), and in scenes like this where the Jews appear as wizards and necromancers, as they are those related to diabolical pact.
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Prohibido el amarillo
Judas asesorado por un horrible diablo recibe la bolsa de monedas de los judíos como pago por la venta de Cristo. El falso Apóstol está caracterizado como un judío con un gran manto amarillo, grupo religioso que también le identifica al compartir la raiz de su nombre y la culpabilidad en la muerte de Jesús.
El amarillo era un color llamativo que servía para identificar a los judíos y distinguirlos de los cristianos, de ahí el mal fario y contenido siniestro de esta tonalidad. Desde los primeros años del s.XIII los Papas pusieron especial énfasis en que los judios usaran ropas distintivas que los diferenciaran de los cristianos para que estos últimos no llegaran a pactos económicos con ellos. Los elementos distintivos eran muy variados desde un broche de color gualdo, un gorro picudo o una capa especial que en el Reino de Aragón se llamaba "clochard" por su semejanza con la campana, por ello en la iconografía medieval se caracteriza a los judíos con un manto de este color. Así se ve en esta escena del pacto de Judas de la Capilla Scrovegni de Padua (principios del s.XIV), y en escenas donde aparecen los judíos como magos y nigromantes, como son las del pacto diabólico.