✿.•.Cecilia.•.✿
El tiempo, tu risa, los reflejos╰☆╮╰☆╮╰☆╮
No existe la felicidad, solo hay momentos alegres. Algunos quieren retener esos instantes de alegría, hacerlos eternos, y es allí cuando inventamos la felicidad. La exigencia de la felicidad es una adicción a sentirse bien, es pretender que las alegrías pasajeras se queden con uno por toda la eternidad sin ver que la verdadera belleza de sentirse bien es saber que pasará y llegarán otras. El asombro. La felicidad es un invento de los infelices, es la alegría sencilla y elemental proyectada en el tiempo. Los que buscan ser felices a todo costa, terminan haciendo a un lado la sal de la vida: el ahora. Esperando lo extraordinario, se olvidan de lo mundano. Alegría disponible; ¿qué más puedo pedir? Como cuando tus ojos me sonríen: es fugaz, se escapa, pero la sensación queda rondando mi mente y mi corazón por semanas, y después se lo lleva el tiempo, el gran amigo. (Escrito por Walter Riso, 28 de diciembre de 2011)
El tiempo, tu risa, los reflejos╰☆╮╰☆╮╰☆╮
No existe la felicidad, solo hay momentos alegres. Algunos quieren retener esos instantes de alegría, hacerlos eternos, y es allí cuando inventamos la felicidad. La exigencia de la felicidad es una adicción a sentirse bien, es pretender que las alegrías pasajeras se queden con uno por toda la eternidad sin ver que la verdadera belleza de sentirse bien es saber que pasará y llegarán otras. El asombro. La felicidad es un invento de los infelices, es la alegría sencilla y elemental proyectada en el tiempo. Los que buscan ser felices a todo costa, terminan haciendo a un lado la sal de la vida: el ahora. Esperando lo extraordinario, se olvidan de lo mundano. Alegría disponible; ¿qué más puedo pedir? Como cuando tus ojos me sonríen: es fugaz, se escapa, pero la sensación queda rondando mi mente y mi corazón por semanas, y después se lo lleva el tiempo, el gran amigo. (Escrito por Walter Riso, 28 de diciembre de 2011)