emeritense
Teatro Romano (III). Mérida
"Príncipe entre los monumentos emeritenses" lo denomina Menéndez Pidal, arquitecto que dirigió su reconstrucción desde 1964. No sólo su monumentalidad le hace merecedor de este calificativo: por un lado, el comienzo de su excavación en 1910, marca un hito en la arqueología emeritense; por otro, es el único edificio que tras su recuperaión ha vuelto a cumplir su función original, celebrándose en él, desde 1933, el Festival de Teatro Clásico.
Desde el teatro, construido por intereses políticos, la autoridad romana realiza una eficiente propaganda de ella misma y del modo de vida romano, tanto a través del propio edificio -grandiosidad de su obra-, como por los mensajes que desde su escenario se pueden transmitir.
(Guia oficial)
Teatro Romano (III). Mérida
"Príncipe entre los monumentos emeritenses" lo denomina Menéndez Pidal, arquitecto que dirigió su reconstrucción desde 1964. No sólo su monumentalidad le hace merecedor de este calificativo: por un lado, el comienzo de su excavación en 1910, marca un hito en la arqueología emeritense; por otro, es el único edificio que tras su recuperaión ha vuelto a cumplir su función original, celebrándose en él, desde 1933, el Festival de Teatro Clásico.
Desde el teatro, construido por intereses políticos, la autoridad romana realiza una eficiente propaganda de ella misma y del modo de vida romano, tanto a través del propio edificio -grandiosidad de su obra-, como por los mensajes que desde su escenario se pueden transmitir.
(Guia oficial)