Blanco natural
NO DEJEMOS DE SOÑAR
Todos hemos soñado, vez alguna,
con tocar las estrellas o la luna;
con ser un trovador de mil baladas
o la sirena Ariel del cuento de hadas...
No, quizá la preciosa Campanilla,
con su cabello rubio... ¡Cuánto brilla! -
Quién no soñó con ser el marinero
de un barco de papel o de un velero;
con alas de cartón, llegar al sol...
de tus labios, robar su tornasol.
Yo soñé, alguna vez, con estas cosas...
como lo hace un zagal con mariposas
de colores brillantes, nacarados...
cual los ojos de dos enamorados.
Y no, no quise ver amanecer
para que no llegara aquel ayer
que disipara sueños y deseos,
las huellas de los cándidos paseos.
Soñemos con la noche, todavía...
Yo sueño hoy, aun despierto, con el día.......
en que los sueños se cumplan.
Pero también hay que dormir … para soñar.
Blanco natural
NO DEJEMOS DE SOÑAR
Todos hemos soñado, vez alguna,
con tocar las estrellas o la luna;
con ser un trovador de mil baladas
o la sirena Ariel del cuento de hadas...
No, quizá la preciosa Campanilla,
con su cabello rubio... ¡Cuánto brilla! -
Quién no soñó con ser el marinero
de un barco de papel o de un velero;
con alas de cartón, llegar al sol...
de tus labios, robar su tornasol.
Yo soñé, alguna vez, con estas cosas...
como lo hace un zagal con mariposas
de colores brillantes, nacarados...
cual los ojos de dos enamorados.
Y no, no quise ver amanecer
para que no llegara aquel ayer
que disipara sueños y deseos,
las huellas de los cándidos paseos.
Soñemos con la noche, todavía...
Yo sueño hoy, aun despierto, con el día.......
en que los sueños se cumplan.
Pero también hay que dormir … para soñar.