Una ciudad para disfrutar
Amarante, en el distrito de Porto, es una exuberante ciudad en la que confluyen la cultura, la historia y la naturaleza en un privilegiado entorno sacado de un cuento renacentista.
A caballo entre el Renacimiento más clásico y el Barroco encontramos el estilo arquitectónico que viste la ciudad de embrujo y misterio. Sus estrechas callejuelas invitan al paseo y sus puentes despertarán en el turista una profunda sensación de equilibrio natural propio del clasicismo.
EL emblemático Convento de S. Gonçalo justo al pasar el puente es lo más espectacular de esta localidad, así como perderse por sus calles antiguas y estrechas por las que parece haberse detenido el tiempo.
Una ciudad para disfrutar
Amarante, en el distrito de Porto, es una exuberante ciudad en la que confluyen la cultura, la historia y la naturaleza en un privilegiado entorno sacado de un cuento renacentista.
A caballo entre el Renacimiento más clásico y el Barroco encontramos el estilo arquitectónico que viste la ciudad de embrujo y misterio. Sus estrechas callejuelas invitan al paseo y sus puentes despertarán en el turista una profunda sensación de equilibrio natural propio del clasicismo.
EL emblemático Convento de S. Gonçalo justo al pasar el puente es lo más espectacular de esta localidad, así como perderse por sus calles antiguas y estrechas por las que parece haberse detenido el tiempo.