_Moments_
_
Viajero, ¿quién eres? Veo que recorres tu camino sin desdén, sin amor, con ojos indescifrables; húmedo y triste cual una sonda que, insaciada, vuelve a retornar a la luz desde toda profundidad -¿qué buscaba allá abajo?-, con un pecho que no suspira, con unos labios que ocultan su asco, con una mano que ya sólo con lentitud aferra las cosas: ¿quién eres tú?, ¿qué has hecho? Descansa aquí: este lugar es hospitalario para todo el mundo- ¡recupérate! Y seas quien seas: ¿Qué es lo que ahora te agrada? ¿Qué es lo que te sirve para reconfortarte? Basta con que lo nombres: ¡lo que yo tenga te lo ofrezco! Oh tú, curioso, ¡qué es lo que dices! Pero dame, te lo ruego-“ ¿Qué? ¿Qué? ¡Dilo!- “¡Una máscara más! ¡Una segunda mascará”...
Friedrich Nietzsche
_
Viajero, ¿quién eres? Veo que recorres tu camino sin desdén, sin amor, con ojos indescifrables; húmedo y triste cual una sonda que, insaciada, vuelve a retornar a la luz desde toda profundidad -¿qué buscaba allá abajo?-, con un pecho que no suspira, con unos labios que ocultan su asco, con una mano que ya sólo con lentitud aferra las cosas: ¿quién eres tú?, ¿qué has hecho? Descansa aquí: este lugar es hospitalario para todo el mundo- ¡recupérate! Y seas quien seas: ¿Qué es lo que ahora te agrada? ¿Qué es lo que te sirve para reconfortarte? Basta con que lo nombres: ¡lo que yo tenga te lo ofrezco! Oh tú, curioso, ¡qué es lo que dices! Pero dame, te lo ruego-“ ¿Qué? ¿Qué? ¡Dilo!- “¡Una máscara más! ¡Una segunda mascará”...
Friedrich Nietzsche