CALLEJON DE HAMEL
El Callejón de Hamel en La Habana (Cuba), una pequeña calle de apenas 200 metros, es una zona donde vivieron algunos de los más importantes renombrados músicos populares que después pasarían a la historia. Allá por los años 40 y 50 las noches bohemias en el Callejón de Hamel regalaron a la música cubana algunas de sus canciones más hermosas…. Melodías tranquilas y letras de amor que dieron origen al movimiento del feeling.
Situado entre las calles Aramburu y Hospital, en el barrio de Cayo Hueso, el Callejón de Hamel es en la actualidad un proyecto cultural comunitario ligado a la cultura afrocubana que inició en los años 90 el pintor, escultor y muralista Salvador González Escalona.
Los coloridos dibujos representan como ninguno el sincretismo religioso y cultural de la isla y reproducen a distintos dioses y orishas, símbolos espirituales y animales, con poemas o leyendas escritas en ellos, sobre la vida, el amor, la familia, la dignidad, etc.
Su objetivo era revitalizar una calle de la barriada de Cayo Hueso, creando un espacio en el que el arte y los vecinos pudieran interactuar, y aunque al principio le tocó remar a contracorriente, el tiempo le dio la razón.
El callejón debe su nombre al ciudadano norteamericano de origen franco-alemán Fernando Belleau Hamel, que a principios del siglo XX puso en marcha en esta zona una fundición, y cuya generosidad con los numerosos trabajadores que tuvo a su cargo todavía se recuerda en el barrio. 01-12-2008.
CALLEJON DE HAMEL
El Callejón de Hamel en La Habana (Cuba), una pequeña calle de apenas 200 metros, es una zona donde vivieron algunos de los más importantes renombrados músicos populares que después pasarían a la historia. Allá por los años 40 y 50 las noches bohemias en el Callejón de Hamel regalaron a la música cubana algunas de sus canciones más hermosas…. Melodías tranquilas y letras de amor que dieron origen al movimiento del feeling.
Situado entre las calles Aramburu y Hospital, en el barrio de Cayo Hueso, el Callejón de Hamel es en la actualidad un proyecto cultural comunitario ligado a la cultura afrocubana que inició en los años 90 el pintor, escultor y muralista Salvador González Escalona.
Los coloridos dibujos representan como ninguno el sincretismo religioso y cultural de la isla y reproducen a distintos dioses y orishas, símbolos espirituales y animales, con poemas o leyendas escritas en ellos, sobre la vida, el amor, la familia, la dignidad, etc.
Su objetivo era revitalizar una calle de la barriada de Cayo Hueso, creando un espacio en el que el arte y los vecinos pudieran interactuar, y aunque al principio le tocó remar a contracorriente, el tiempo le dio la razón.
El callejón debe su nombre al ciudadano norteamericano de origen franco-alemán Fernando Belleau Hamel, que a principios del siglo XX puso en marcha en esta zona una fundición, y cuya generosidad con los numerosos trabajadores que tuvo a su cargo todavía se recuerda en el barrio. 01-12-2008.