Cripta de la Colònia Güell
No existen datos para afirmar que el enlucido inferior de los muros se trate de un arrimadero intencionado, es decir, de un revestimiento especialmente destinado a las zonas con contacto antrópico. Parece más bien que los albañiles se limitaron a enlucirlos hasta donde era posible alcanzar sin andamios. Tampoeo el hecho de que en algunos pilares unas bellísimas catenarias diferencien dos tipos de texturas no prejuzga que esa durabilidad deberá producirse en todos los revestimientos. En el caso de los pilares, la intención formal responde al tránsito entre una planta circular en la base y una poligonal en el arranque de los nervios.
Informes de la Construcción, Vol. 54, n° 481-482, septiembre-oclubre/noviembre-dicicmbre 2002
Cripta de la Colònia Güell
No existen datos para afirmar que el enlucido inferior de los muros se trate de un arrimadero intencionado, es decir, de un revestimiento especialmente destinado a las zonas con contacto antrópico. Parece más bien que los albañiles se limitaron a enlucirlos hasta donde era posible alcanzar sin andamios. Tampoeo el hecho de que en algunos pilares unas bellísimas catenarias diferencien dos tipos de texturas no prejuzga que esa durabilidad deberá producirse en todos los revestimientos. En el caso de los pilares, la intención formal responde al tránsito entre una planta circular en la base y una poligonal en el arranque de los nervios.
Informes de la Construcción, Vol. 54, n° 481-482, septiembre-oclubre/noviembre-dicicmbre 2002